jueves, 3 de diciembre de 2009

HISTORIA DE LA FERIA DE LA PIÑATA



En un principio, esta festividad sirvió a la orden de los franciscanos como un medio para instruir a los indios acera del nacimiento de Cristo, mediante representaciones hechas por los mismos frailes, en donde por medio de la evangelización quisieron posteriormente dar a entender a los indígenas a través de una cruz e imágenes la representación del dolor y el martirio que vivió Jesucristo en su pasión. Con el tiempo el Papa Sixto V en 1587 la propuesta de los agustinos, que consistía en que los propios indígenas representaran y cantaran el mencionado peregrinaje. Así, en esos nueve días de posadas los nativos eran catequizados: la piñata, olla de barro rellena de fruta, cacahuates, (adornada con recortes de papel) de distintos colores que los asistentes, previamente vendados y armados con un palo, tratan de romper para llevarse la fruta.

Las posadas son una tradición popular mexicana que tienen lugar en su festejo del 16 al 24 de Diciembre y conmemora el peregrinar de la Virgen María y San José camino a Belén para buscar un lugar y poder pasar la noche.

La Navidad, celebración anual en la que se conmemora el nacimiento del niño Jesús en Belén, según los evangelios de San Mateo y San Lucas.

La Navidad es una creación del Siglo XIX, el árbol es originario de zonas germanas, el cual se extendió por otras zonas de Europa y América. Los villancicos fueron recuperados y se originaron algunos nuevos. Las tarjetas de Navidad empezaron a utilizarse hasta la década de1870 aunque la primera de ellas se imprimió en Londres en 1846. La familiar imagen de Santa Claus con el trineo los renos y las bolsas con juguetes es una invención estadounidense de estos años, aunque la leyenda de papa Noel sea antigua y compleja, surja en parte de San Nicolás y una jovial figura medieval, que es el espíritu de navidad.

Actualmente, la Navidad es una fiesta más profana que religiosa, es un tiempo de gran actividad comercial e intercambio de regalos, reuniones y comidas familiares. En occidente se celebra la misa de gallo, en iglesias y catedrales. En los países de América Latina, de arraigada tradición católica se celebra especialmente la Nochebuena (24 de diciembre). Con una cena familiar en la que se elaboran una gran diversidad de platillos, postres y bebidas tradicionales, también se acostumbra a asistir a Misa de Gallo y celebrar con cohetes y fuegos artificiales.

En Mexico, la Nochebuena constituye la culminación de una celebración que dura nueve días a la que se le llama “Las Posadas”. Estas empiezan el 16 de diciembre y conmemoran el viaje de María y José en búsqueda de alojamiento antes del nacimiento de Jesús. El numero nueve alude a los nueve meses de embarazo de María, parte esencial de esta fiesta y que consiste en pedir posada mediante unos cánticos en los que unos asisten solicitando el favor de ser recibidos y otros el de responder, primero negándose y al final concediéndolo, con lo que todos estallan en jubilo por el feliz final de la travesía de los peregrinos. Otro elemento fundamental es la piñata que con el canto de la letanía, las luces de bengala, los dulces y las bebidas propias de la época aglutinan las enseñanzas introducidas por los evangelizadores en la Nueva España en la segunda mitad del Siglo XVI. El origen de las piñatas y las posadas se da en El Ex Convento de San Agustín Acolman, en donde los Monjes agustinos aprovechan la coincidencia de las fechas cristianas y las de los ritos de los aztecas, quienes festejaban el nacimiento de su máxima deidad, el Dios Huitzilopochtli.

Las piñatas simbolizan las tres virtudes teologales:

*La fe, se vendan los ojos sin otro guía más que las voces arriba, abajo, atrás, adelante que tratan de hacernos el mal.

*La esperanza, porque miramos hacia el cielo anhelando y esperando el premio.

*La caridad, porque si se rompe la piñata destrozamos los vistosos oropeles del pecado, alcanzando los regalos deseados para compartirlos.

La piñata representa la lucha que sostiene el hombre valiéndose de la fe simbolizada por el palo para destruir el mal de la pasiones, mismos que representan los siete pecados capitales como son: lujuria, gula, pereza, ira, vanidad, avaricia y soberbia.

ACOLMAN, Pueblo con Encanto del Bicentenario


Desde la carretera México-pirámides puede observarse la enorme construcción que representa el ex convento de San Agustín; ubicado en la cabecera municipal del estado de Acolman, en él pueden observarse pinturas originales del siglo XVI plasmando la majestuosidad de ese siglo. El templo y ex convento es de alta calidad arquitectónica de fachada sombría y estilo plateresco, se encuentra a un costado de la plaza principal. La iglesia ocupa una superficie de 1,054 m2, y sus muros alcanzan una altura de 21 metros. El convento está abierto al público como museo y es considerado el ejemplar más puro de estilo plateresco en México; su magnífica fachada data de 1560. En el interior del templo se conservan tres retablos dorados y estofados. Sin embargo, todo el conjunto es sumamente importante, siendo de especial interés el claustro que conserva interesantes pinturas murales.

Los frailes Agustinos de la tercera orden religiosa que llegó a la Nueva España, fueron los que se aposentaron en este pueblo; prueba de su estancia en este lugar es el bello templo y ex convento de San Agustín Acolman, la construcción de este monasterio fue edificada de 1539 a 1560, pero ya desde el año de 1524 se inicio la construcción de esta joya arquitectónica cuando el fraile franciscano Andrés de Olmos levantó un pequeño templo que más tarde fue ampliado por los agustinos, quienes desde el principio de la Conquista se encargaron de evangelizar a los indígenas de la región. Para el año de 1629 se registró una inundación anegándose totalmente el convento. En 1645 sufrió otra inundación. Para 1763 se repitió la invasión del agua y en 1772, se dio otra que obligó al abandono total del templo. El interior del templo se encuentra el Museo de Arte e Historia o Agustino, resguarda importantes pinturas sobre escenas bíblicas del misterio, sufrimiento y resurrección de Jesucristo.

Para 1927 se encontraba en grave peligro de destrucción, pues la iglesia y el convento fueron abandonados, en 1877 la cabecera municipal fue trasladada al Calvario a causa de la gran inundación.

En uno de los patios interiores se encuentra una bella cruz del siglo XVI tallada en piedra, pieza única en su género; existen también objetos de arte diversos, entre otros chacmoles o cerámica prehispánica, escultura en materia de la réplica de la "Piedad" y una pintura al óleo de Miguel Cabrera.

Acolman fue un pueblo independiente en la época prehispánica, pero en algún tiempo, tuvo peleas con los huexotzincas, de las que resultó vencido. Sin embargo, mediante las batallas continuas logró llegar a ser un pueblo importante en el reino de Nezahualcóyotl. Y como todos los pueblos antiguos, se vio sometido a la conquista española cambiando sus costumbres.

Acolman cuenta con 12 monumentos catalogados por el INAH, todos ellos de carácter religioso.

Dentro de los atractivos de este pueblo podemos encontrar los siguientes atractivos:

• Museo y zona arqueológica de Tepexpan. Encontraron los restos fósiles del llamado "Hombre de Tepexpan" con más de 12 mil años de antigüedad. Único pueblo de Mesoamérica que se dedicó a la cría de perros Xolitzcuintli, Tepeitzcuintle e Itcuintepotzotli.

• Templos; San Nicolás Tolentino y Parroquia de San José Xomatla; siglo XVI.

• Parroquias; Santa Catarina y de San Francisco de Asís, del siglo XVII; Santa María Magdalena, Capilla San Pedro, Parroquia San Mateo Chipiltepec, Capilla San Lucas, Capilla San Juan Bautista y Presa del Castillo, del siglo XVIII.

• 4 Ex-haciendas: San Antonio (centro recreativo), Tepexpan, Nextlalpan y San Jorge.

• En la localidad de Xometla se ubican "Las Cuevas del Gato" y la Ex-hacienda San Jorge.

• Parques Ecoturísticos: Sierra Patlachique y las Cuevas de la Amistad.

• Ferias y Celebraciones: Del 16 al 24 de diciembre se lleva a cabo la feria "De la Posada y la Piñata" pues se afirma que en Acolman nacieron las muy mexicanas posadas navideñas, donde se hacen bailes populares y concursos de piñatas. Las fiestas navideñas son las tradiciones más representativas, destaca un concurso para premiar la piñata más grande y original en donde participan todas las comunidades, y se realizan también carreras de caballos como una costumbre que se remonta desde la etapa de la Revolución.; Celebración de la Virgen de Guadalupe (diciembre); Feria de San Miguel arcángel (septiembre); Fiesta de San Nicolás (septiembre) y Nombramiento de Acolman como municipio (6 de enero).